“COMO PERSONAS
SIN CABEZA”
Creo
que no hay una mejor manera de comenzar este argumento, sino haciendo
referencia al dicho “como pollos sin cabeza” que puede resumir perfectamente en
una frase con un trasfondo cómico y ciertamente irónico dirigiéndome a la sociedad.
No solo hablo de la sociedad actual, sino de la manera de la que se pueden
orientar la educación y las culturas sin un razonamiento previo, sobre nuestras
generaciones futuras.
Sería
muy insensato, reconocer que nos está costando asimilar la multitud de cambios
que se aplican en las nuevas tecnologías día a día. Y junto a ello su
respectivo uso. Si nos giramos y miramos hacia atrás, en la historia nos
daremos cuenta de lo tardío y costoso que ha sido a lo largo de nuestra
historia asimilar y acoger cambios para que las sociedades progresen y aún más
importante, aplicarlos a las rutinas de los ciudadanos medios. Y hoy en día es
meramente imposible tratar de seguir el ritmo que la ciencia y la tecnología
nos aportan. A esto debemos añadir las soluciones que todavía hoy en día son
insignificantes para corregir los errores, o unas malas conductas que muchas personas
puedan tener, ya que son mundos prácticamente inexplorados por la ley.
No podríamos nombrar los descontroles sociales que pueden provocar las nuevas tecnologías, haciendo especial referencia a las redes sociales, internet y la globalización en general, sin nombrar las “FAKE NEWS” haciendo referencia el termino inglés a las noticias falsas o bulos que pueden crear confusión en muchos casos, provocando en ciertos casos hasta conflictos.
Somos
probablemente la sociedad que dispone de una mayor cantidad de información, y a
su vez, de las peores formadas. Esto se debe a que nos conformamos con pensar
que tenemos toda la información en internet a nuestro alcance, que ya muchas
veces no somos capaces de molestarnos o interesarnos en aprender. Esta actitud
se va plasmando cada vez de una manera más y más férrea en las generaciones
jóvenes. A las cuales se les premia por una nota y no por adquirir y comprender
conocimientos. Lo cual fomenta a su vez esta actitud ciertamente perezosa.
Además,
mientras gran parte de la población no se molesta en tratar de aprender como
funcionan las nuevas tecnologías, y por lo tanto continúan en la ignorancia.
Otros muchos, con malas intenciones, mediante una simple publicación, o un
mensaje que pueda ser en cierto modo ambiguo, confuso o completamente incierto,
puede provocar mal entendimientos entre sus lectores, e incluso con sus círculos
cercanos. Hay que ser consciente de que no todas las noticias falsas se crean
con mala intención, y que algunas se crean por falta de información, por
omisión de datos o por una mal interpretación de los hechos. Pero no por ello
se deben menospreciar su posible influencia, ya que el resultado puede ser
igual o incluso peor que una “FAKE NEW” realmente premeditada.
La realidad es que hoy en día cualquier persona con un mínimo conocimiento tecnológico puede tener acceso a la mayoría de las redes de todos los lugares del mundo. Esto significa, que por desgracia, los criminales también tienen acceso a todas estas facilidades. Y personalmente considero, que en realidad, cuando vemos una noticia en internet no la contrastamos y le damos una completa credibilidad y confianza al mensaje en cuestión. Pero sin embargo, si nos lo cuenta un extraño por la calle, podríamos empezar a dudar, y seguramente trataríamos de buscar información en internet para contrastarlo. Lo que significa que, en términos generales, si el mensaje es procedente de detrás de la pantalla, automáticamente es mucho más probable que ese mensaje se propague. Totalmente independiente de si es una noticia o mensaje real o falso.
Como se observa en el artículo, la mayoría de “FAKE NEWS” suelen ser sobre temas políticos, ya que son los temas que en su gran mayoría poseen una importante influencia sobre el resto de la sociedad y abarcan temas generales, que tratan de llamar la atención de todo el público posible como técnica expansiva. Esto significa que a pesar de que la política sea ya de por sí inestable, debido a que cada vez se solidifica la libertad de pensamiento dentro de la sociedad, y siguen apareciendo nuevas conductas, corrientes y pensamientos. Que por un lado aportan variedad a la política y ofrecen nuevos puntos de vista y moldear la política en torno a los avances de la sociedad. Sin embargo, por el otro, cada vez complica más la toma de decisiones por ambos lados, tanto por el lado de los políticos que deben pensar mejor la manera de enfocar los partidos políticos. Y por otro lado para los votantes se encuentran con una mayor variedad de partidos, y deben centrar concentrar aún más su ideología a un único partido político.
A
modo de resumen, nos encontramos con una sociedad que se enfrenta a una innumerable
cantidad de peligrosas situaciones en las redes e internet, que ponen en manos
de desconocidos ciertos datos e información personal. Que se han creado a
partir de la nueva revolución tecnológica. Pero su avance sin cesar, favorece a
numerosas labores que nos ayudan a mejorar la sociedad y numerosos problemas,
pero también a que sigan apareciendo nuevos tipos de delitos cibernéticos, y
fallos en las redes. A este paso, hasta que no aparezcan ciertas soluciones,
llegará un momento en el que no estaremos seguros en ningún lugar de la red. Y
esto derivaría en desastrosas caídas de la producción, ya que si una de las
bases principales para el comercio internacional y la globalización, de la que
viven una enorme cantidad de países, pasara a ser un lugar inseguro, se
empezaría a prescindir de él. Sobre todo a las nuevas generaciones que prácticamente,
“nacen con un móvil en la mano”, pero la educación no es capaz de adaptarse y
centrar grandes partes del tiempo de los jóvenes en prepararlos para que puedan
navegar seguros, y por encima de todo, sean capaces de controlar las
tecnologías, que responderán a los futuros modelos de vida a los que vamos
encaminados. Donde se vuelven casi necesarias las tecnologías en nuestro día a
día.
Finalmente
para concluir, me gustaría añadir que la solución para las “FAKE NEWS”,
probablemente esté aún lejos debido a que es bastante complicado encontrar una
manera de evitar que primeramente las fuentes que proporcionan la información
sean fiables de forma que no de lugar a duda. Y nuevamente que la información
sea veraz. Mi propuesta sería crear un sistema de un mínimo análisis previo a
la publicación de las noticias. Primeramente daría pie a nuevos empleos y crearía
un ambiente más sano, en el sentido de que se pararía de tratar de buscar ser el
primero en subir las noticias, para conseguir un beneficio económico gracias a
ello. Y se empezaría a tratar de buscar mejores noticias, y probablemente donde
el contenido sea más interesante. Como un efecto secundario, de carácter positivo,
daría lugar a bajar la euforia de ser los primeros. Y por lo tanto, caería en
cierto modo gran cantidad de noticias conflictivas o de carácter ofensivo o
atacante.
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